Día 1: Llegada a Hanói

¡Finalmente estoy en Vietnam! Tras un largo vuelo, aterricé en el bullicioso aeropuerto de Hanói. Antes de llegar, asegúrate de obtener tu visa en línea a través del sistema de visa electrónica de Vietnam (e-visa). Es fácil y te ahorra tiempo en el aeropuerto. Después de instalarme en mi hotel, me aventuré a explorar la encantadora capital vietnamita. Recorrí el casco antiguo, con sus estrechas calles llenas de vida y color. No puedes perderte el famoso lago Hoan Kiem, donde puedes relajarte y disfrutar de la atmósfera tranquila.

Día 2-3: Bahía de Halong

El siguiente destino en mi lista era la impresionante Bahía de Halong. Tomé un autobús local desde Hanói hasta el puerto de Halong, donde abordé un crucero que me llevó a través de las aguas turquesas salpicadas de islas de piedra caliza. Pasé dos días explorando cuevas escondidas, kayak en aguas tranquilas y disfrutando de las puestas de sol inolvidables. ¡Definitivamente un punto culminante de mi viaje!

Día 4-5: Hue

Desde Halong, tomé un vuelo corto a Hue, una ciudad llena de historia y encanto. Aquí, me sumergí en la rica cultura vietnamita visitando la Ciudadela Imperial y explorando los antiguos templos y pagodas. No te pierdas un paseo en bote por el río Perfume para visitar las tumbas reales y disfrutar de la belleza serena del paisaje.

Día 6-7: Hoi An

Continué mi viaje hacia el sur hasta llegar a la encantadora ciudad de Hoi An. Esta ciudad antigua, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es famosa por sus calles empedradas, linternas de colores y exquisita cocina. Pasé dos días explorando los talleres de seda, probando delicias locales en el mercado nocturno y relajándome en las hermosas playas cercanas.

Día 8-9: Ciudad Ho Chi Minh

Mi próxima parada fue la bulliciosa Ciudad Ho Chi Minh, anteriormente conocida como Saigón. Desde Hoi An, tomé un autobús nocturno que me llevó directamente a esta vibrante metrópolis del sur. Aquí, visité el Palacio de la Reunificación, la catedral de Notre Dame y el mercado de Ben Thanh. También reservé un día para explorar los túneles de Cu Chi, una fascinante red de túneles subterráneos utilizados durante la guerra de Vietnam.

Día 10: Regreso a Hanói

Mi último día en Vietnam fue un viaje de regreso a Hanói, donde me tomé un tiempo para reflexionar sobre las increíbles experiencias que había vivido en este hermoso país. Paseé por las calles una vez más, saboreando la deliciosa comida callejera y absorbiendo la energía única de la ciudad.

¡Y así concluyó mi épico viaje por Vietnam! Desde la majestuosidad natural de Halong hasta la historia cautivadora de Hue y la vitalidad de las ciudades, cada momento fue una aventura inolvidable. Sin duda, un destino que recomendaría a cualquier amante de los viajes.